
La importancia de viajar con un buen seguro de coche
El mundo es inmenso, en concreto son 6.357 kilómetros de diámetro, si medimos nuestro planeta tierra por la línea del ecuador. Unos 510 millones de kilómetros cuadrados ¡se dice pronto! Podemos recorrer gran parte del mapa en avión, barco, tren, motocicleta y por supuesto, en coche. Pero no hay nada más importante que viajar con la seguridad de que pase lo que pase estarás protegido. Por eso es primordial que antes de poner rumbo a tu destino soñado, compruebes que tienes un buen seguro de coche con las mejores coberturas. Y obviamente, que no te deje tirado cuando los imprevistos hagan su aparición estelar.
Vayas donde vayas, viaja con un buen seguro de coche
El coche se sitúa en segundo lugar, detrás del avión, en la lista de medios de transporte más utilizados para los desplazamientos, ya que se usa tanto a diario como de forma puntual por miles, y millones, de personas. Para traslados cortos o de larga distancia. No me cabe duda de que también existirán datos estadísticos sobre el número de personas que pinchan una rueda diariamente o a los que de repente comienza a fallarles el cuadro de mandos, el climatizador, el cierre… Cualquier pequeña avería puede estropearnos el maravilloso slow travel por Castilla y León, que teníamos planeado ¡que horror!
Desde luego, hay ciertos imprevistos que no se pueden evitar, pero lo que si podemos hacer es asegurarnos de que antes de viajar tenemos todo ¡atado y bien atado! y que a la hora de subsanar cualquier eventualidad lo hagamos en el menor tiempo posible y sin quebraderos de cabeza. Que sea fácil y sencillo, ¿verdad?

Viajar con un buen seguro de coche que nos transmita tranquilidad, confianza y se ajuste a nuestras necesidades. Esto supondrá no perder nuestro valioso tiempo (ni nuestra paz mental). De ahí la conveniencia de conocer todas las opciones que te ofrece una aseguradora:
- El seguro de auto básico más lunas es el más económico, el conocido como «a terceros». Te cubren la rotura de lunas, retirada del carnet, asistencia en viajes… Sin embargo hay ciertas cosas que no están aseguradas y que si quieres tener cubiertas deberás contratar alguno de los que te hablo a continuación.
- Básico más robo, tiene todas las coberturas anteriores y te asegura el vehículo en caso de robo, fenómenos de la naturaleza, incendios y colisiones con animales cinegéticos (en la carretera nunca se sabe)
- Lo que no cubren los dos seguros anteriores son los llamados daños propios, lo que viene siendo golpearse con la columna del garaje por ejemplo… para eso podemos contar con el seguro a todo riesgo. Económicamente es el más caro pero es el que nos cubre totalmente ante cualquier imprevisto. Si eres de los que cogen el coche muy a menudo este es el tuyo. Los seguros a todo riesgo pueden ser con o sin franquicia. Una franquicia implica que tu pagarás X cantidad inicial para la reparación de los daños que haya sufrido tu vehículo y la aseguradora se hace cargo de la cuantía que supere esa cantidad pactada.
Pero no solo de reparaciones vive el hombre (bueno, el coche). Si hablamos de quedarnos tirados cuando estamos de camino a nuestras vacaciones de ensueño, ¡necesitaremos un coche de sustitución!. Verse en la carretera con los niños, el perro y las maletas no es moco de pavo. Algo así no puede estropearnos el plan, así que busca un buen seguro de coche que te preste un sustituto durante el tiempo que dure la avería y así solo tendrás que preocuparte de disfrutar ¡eso sí que es un buen plan!

